Bienestar On Demand

Consultora de Recursos Humanos

La pandemia sin duda cambió las agendas de los profesionales de recursos humanos.

Las empresas son un grupo de personas – equipo en el mejor de los casos – con un objetivo en común. Las personas son, entonces, las piezas fundamentales de las organizaciones, por lo tanto, el desarrollo de la organización debe comenzar por la asistencia y el cuidado de los individuos. El ser humano es el activo principal de toda organización. Es su diferencial y debe ser su prioridad.

Ahora bien, ¿qué pasó en esta pandemia? Todo cambió. Cambiaron las rutinas, los hábitos y por ende nuestras costumbres. Nos tuvimos que adaptar a la nueva normalidad.

Esa adaptación aceleró los efectos generados por la transformación digital, la automatización de procesos, la robotización y todos los cambios que estamos viendo, pero por sobre todo, acentuó la importancia del factor humano y de la experiencia humana como generadores de resultados de la empresa.

En un estudio sobre el futuro del trabajo el 80% de las empresas respondieron que la Experiencia del Empleado (EX) será la máxima prioridad en las agendas de los próximos 3 años.

Sin embargo, no todos los cambios son positivos. Otro estudio muestra que el 70% de los encuestados redujo su actividad física. 6 de cada 10 aumentaron de peso. 5 de cada 10 manifiestan sufrir la hiperconectividad.

 

El exceso de trabajo fue otro de los factores menos manejados en esta pandemia A veces decirle que sí a todo, es decirle que no a uno mismo. La ausencia de sueño, buena alimentación, ejercicio, relajación y pasar tiempo de calidad con amigos y familia no es algo que deba ser aplaudido. Demasiadas personas se enorgullecen de estar quemados y este no es un logro a celebrar

Tenemos que cambiar esto. ¿Cómo hacerlo entonces?

Una opción es con un programa de Bienestar corporativo ya que a mediano-largo plazo da su máximo beneficio, mediante la adopción de hábitos saludables que conducen a mejoras en la salud y en el rendimiento de colaboradores y equipos.

De acuerdo a nuestra experiencia los resultados obtenidos fueron:

  • Mejora la productividad
  • Potencia mentes más lúcidas, mayor creatividad y más energía
  • Mejora la experiencia del empleado
  • Facilita la cohesión de equipos de trabajo y aumenta el rendimiento
  • Mejora la marca empleadora.
  • Disminuye el estrés
  • Disminuye ausentismo por enfermedad o accidentes
  • Visibiliza la Responsabilidad Social Empresarial de la organización.

¿Cómo implementarlo?

Lo primero que tenes que hacer es preguntar.

  • Cambios de hábitos: alimentación, salud física, salud emocional.
  • ¿Son valorados los beneficios que hoy tengo en mi organización?
  • ¿Qué herramientas estoy brindando para ayudar a mis colaboradores?

¡No es necesario un gran presupuesto!

 En definitiva, un programa de bienestar implica poner a las personas en el centro. Las personas cuidadas, con hábitos saludables, funcionan mejor. La realidad cambió y no vamos a regresar a lo anterior. Se valorarán esquemas de trabajo con modelos flexibles, que se acoplen a las personas y que nos permitan fluir con ellas.

La invitación es a trascender hacia una consciencia del propio cuidado. Alentar el cambio de hábitos, que, aunque a veces duele, cuando se lo hace sabiendo para qué, hacerlo es gratificante.. Se trata de iniciar un círculo virtuoso en la generación de hábitos.

 Diego Hilaire Chaneton